Recentiores es un vocablo de origen latino que significa "los más recientes". Fue empleado en el siglo XVIII durante el movimiento humanístico jesuita que pugnaba por escuchar la voz de la filosofía moderna en el ambiente anquilosado de la escolástica medieval. Humanistas mexicanos de la talla de Francisco Javier Alegre, Francisco Javier Clavijero y Andrés de Guevara y Basoazábal lo utilizaron con frecuencia en sus obras para referirse a los pensadores "más recientes" cuyas ideas y teorías enriquecerían indiscutiblemente la cultura en las aulas mexicanas de aquella época, hecho que, en gran medida, contribuyó al tiránico decreto de Carlos III para expulsarlos de España y de las provincias de ultramar.

A más de dos siglos de distancia, sin tiranos y sin decretos, decidimos utilizar este término para encabezar la sección dedicada a los creadores "más recientes", es decir, los más jóvenes, convencidos de que su voz tiene la jovial aportación que enriquece el ámbito de la labor literaria.